Tejiendo esperanza en tiempos de retrocesos

Hora de Obrar junto a organizaciones latinoamericanas copartes de Pan para el Mundo, se reunieron en Madrid para fortalecer alianzas, analizar desafíos y robustecer su agenda colectiva frente al retroceso de derechos y el debilitamiento de la cooperación internacional en materia de justicia de género.

Durante una semana intensa de trabajo colaborativo, referentas de diez organizaciones de Brasil, Argentina, Bolivia, Perú, Colombia, Ecuador y México —copartes de Pan para el Mundo— se encontraron en la capital española para profundizar su articulación política y reafirmar el compromiso con la justicia de género. El encuentro, que se realizó del 18 al 23 de mayo, permitió intercambiar análisis sobre los escenarios nacionales, regionales y globales, y renovar los lazos que las unen desde 2019.

“Fue un encuentro muy provechoso, dado el contexto desafiante que plantean el escenario de cooperación internacional al desarrollo y el avance de los fundamentalismos para las organizaciones de derechos humanos, especialmente aquellas que trabajan por la justicia de género”, señaló Mariana Malgay, coordinadora de comunicación y referente en temas de género de la Fundación Hora de Obrar.

“Estamos viendo cómo se reducen los presupuestos para prevenir la violencia de género, se restringe el acceso a derechos garantizados como la educación sexual integral o el acceso a métodos anticonceptivos, cómo se deteriora la salud pública o cómo personas con cargos públicos y cuentas institucionales amplifican y generan desinformación y discursos de odio”, detalló Malgay: “Esto hace que nuestras democracias se debiliten, que las mujeres y las niñas  tengan mayor carga de cuidados y menos posibilidades de construir proyectos de vida autónomos”.

Uno de los consensos más urgentes fue la necesidad de asegurar financiamiento institucional para sostener recursos humanos y capacidades organizativas. En esa línea, se delineó una estrategia conjunta para la búsqueda y ampliación de fondos, en diálogo con Pan para el Mundo, que permita a las organizaciones seguir actuando en contextos crecientemente hostiles.

Asimismo, se reafirmó el compromiso con una transversalización real de la justicia de género en todos los proyectos, y se propuso desarrollar mecanismos de incidencia, incluyendo temas como la soberanía alimentaria con perspectiva de género, la agroecología y la justicia climática.

Desde Madrid, las aliadas de Pan para el Mundo reiteraron su compromiso con una agenda feminista activa y transformadora, que resista los embates del contexto actual y sostenga con fuerza el horizonte de la justicia de género.

A un año de la campaña de emergencia alimentaria: el hambre no cesa

Hace un año, desde la Fundación Protestante Hora de Obrar lanzamos una campaña para acompañar a cientos de familias que atraviesan una situación crítica en el acceso a los alimentos. Hoy, con enorme gratitud, queremos compartir lo que esta red de solidaridad ha logrado y renovar el llamado: la emergencia continúa, y el invierno golpea más fuerte que nunca.

Gracias al compromiso de 86 personas, y a donaciones de empresas e instituciones, que dijeron al llamado, en este primer año logramos reunir más de 27 millones de pesos y distribuir más de 10 toneladas de alimentos. Este esfuerzo colectivo es una señal clara de que nuestras comunidades no son indiferentes al dolor ajeno. Pero también es un recordatorio: el hambre no se terminó, la emergencia continúa y el invierno no espera.

Fe que se cocina en las ollas

Una de las experiencias más conmovedoras de este año ha sido la que se vive cada semana en la Congregación Evangélica Alemana de Rosario, donde la comunidad entrega 100 viandas los martes y 80 los sábados en la terminal de ómnibus. Allí, cientas de personas reciben no solo un plato de comida, sino también una palabra, una escucha, un abrazo.

“Yo sentía que mi fe estaba incompleta hasta que empezamos con estas acciones. Ahora siento que me encuentro con Dios allí, entre las ollas y entre quienes reciben una ración de alimento que les permite irse a dormir con algo en la panza”, cuenta uno de los jóvenes que forma parte del dispositivo.

Un llamado al corazón de nuestras comunidades

Sabemos que los tiempos son difíciles para todas las familias, pero aún más para quienes no tienen garantizada una comida diaria. Por eso, invitamos a las congregaciones, comunidades de fe y personas solidarias a renovar el compromiso con esta campaña. Sigamos a Jesús multiplicando panes. Tu ayuda puede marcar una diferencia concreta en la vida de más de 1.000 personas —niños, niñas, jóvenes y adultos— que siguen necesitando reforzar su alimentación.

👉 Doná o compartí el enlace con quienes puedan sumarse:
🔗 https://donaronline.org/fundacion-hora-de-obrar/asistencia-alimentaria

Este invierno, volvamos a ser abrigo y alimento. Sigamos haciendo de la diaconía una forma viva de nuestra fe, una fe que se expresa con las manos, con la mesa compartida, con el pan repartido con amor y solidaridad.

10 años de Ni Una Menos: mujeres de anuncio y de denuncia

El 3 de junio se cumplió una década de la primera marcha masiva contra la violencia de género en Argentina. Aquel grito colectivo encendió movilizaciones en toda Latinoamérica. Se multiplicaron las acciones, las conquistas y también los desafíos. Desde la fe, es posible leer este proceso como un testimonio vivo de resistencia, memoria y compromiso con la vida.

“No queremos más mujeres muertas por femicidio”, fue la consigna de aquella tarde de 2015 en la plaza del Congreso. Una multitud se había convocado tras el femicidio de Chiara Páez, una adolescente embarazada de 14 años, asesinada por su pareja en Rufino, Santa Fe.

Desde entonces, cada 3 de junio, miles de mujeres y diversidades renuevan ese grito que exige justicia, reparación y una vida libre de violencias. En esta década, el movimiento ha logrado avances fundamentales: leyes como la Ley Micaela para capacitar a todos los funcionarios y funcionarias del estado y la Ley Brisa de reparación económica para hijos e hijas víctimas de femicidio, la creación de registros oficiales y observatorios, programas de asistencia, espacios de prevención y acompañamiento. También se ha logrado un cambio cultural: hoy la violencia de género forma parte de la conversación pública y ya no puede ser ignorada.

La deuda es con las mujeres

A pesar de los avances, las cifras de femicidios no bajaron, lo que demuestra la persistencia de una problemática estructural. Según el Observatorio de las Violencias de Género Ahora que Sí Nos Ven hubo casi 3000 femicidios en estos últimos 10 años. En el 85% de los casos el femicida pertenecía al círculo íntimo o era conocido de la víctima. El 64% de los casos fueron en la vivienda de las víctimas. El 17% había realizado al menos una denuncia y el 10% tenía una medida de protección judicial. Hoy en la Argentina vemos el desfinanciamiento y desmantelamiento de las políticas de género. Los retrocesos implican más daño, más violencia y más muertes de niñas y mujeres.

¿Qué nos dice el Evangelio ante esta realidad? 

La revelación de Jesús resucitado a las mujeres es un acto de reivindicación. Ellas acompañaron, apoyaron y financiaron a Jesús durante todo su ministerio. Estuvieron con Jesús en todo el proceso de traición, enculpamiento, asesinato y también al pie de la cruz. Ellas limpiaron y perfumaron su cuerpo muerto mientras los discípulos varones se dispersaron y se encerraron presos del miedo por la persecución.

La experiencia de la resurrección es inicialmente una experiencia de fe desde la resistencia a la violencia brutal del patriarcado y el acompañamiento de Jesús. El anuncio de la resurrección es al mismo tiempo un acto de denuncia para reivindicar la lucha por la vida digna y la justicia por encima de la muerte y la impunidad. 

Hoy, a diez años de aquella primera marcha, reconocemos en las mujeres que denuncian, que acompañan, que organizan ollas, que levantan merenderos, que cuidan, que escriben, que educan y resisten, a las mujeres del Evangelio. Mujeres de anuncio y de denuncia. 

Desde nuestras comunidades de fe y desde nuestras acciones, acompañamos este clamor porque creemos en un Dios de justicia que no es indiferente al dolor de su pueblo. Porque seguimos a un Jesús que se dejó abrazar por las mujeres y que las eligió para ser portadoras de su mensaje. Porque confiamos en el Espíritu que alienta y sostiene cada gesto de ternura y de lucha.

Ni una menos. Vivas, libres y con derechos nos queremos. 

Para profundizar esta mirada teológica sobre las mujeres en el Evangelio y su vínculo con las luchas actuales, compartimos el cuadernillo Será de Dios, disponible para descargar gratuitamente en bit.ly/SeraDeDios

Pastoren wurden Opfer von Repression

Die Argentinische Föderation Evangelischer Kirchen (FAIE) verurteilte die Repression, die am Mittwoch, dem 14. Mai, vor dem Kongress der Nation stattfand, aufs Schärfste.

Der wöchentliche Marsch für die Rechte der Rentnerinnen und Rentner, der friedlich verlief und von religiösen Vertreterinnen und Vertretern verschiedener Konfessionen begleitet wurde, wurde erneut von den Sicherheitskräften unter Anweisung des nationalen Sicherheitsministeriums gewaltsam unterdrückt.

Als Evangelische Stiftung „Hora de Obrar“ schließen wir uns dieser Verurteilung an und bekunden unsere Solidarität mit allen Menschen, die Opfer der Repression geworden sind. Als Teil des Ökumenischen Runden Tisches bekräftigen wir unser Engagement für eine umfassende  Demokratie, ein friedliches Zusammenleben und einen Dialog, der von Liebe geprägt ist. Jesus ruft uns zur Solidarität mit jedem ausgegrenzten, weggeworfenen und gewaltbetroffenen Menschen auf:

 „Was ihr für einen meiner geringsten Brüder und Schwestern getan habt, das habt ihr mir getan.“ (Mt 25,40)

Der Ökumenische Runde Tisch für Demokratie, Leben und Gemeinwohl, dem auch die FAIE angehört, hatte dazu aufgerufen, den Protest in einem kollektiven und prophetischen Zeichen zu begleiten – mit Erkennungszeichen und religiöser Kleidung unter dem Motto: „Im Glauben umarmen und segnen wir die Rentnerinnen und Rentner“, als Ausdruck der Forderung nach einem würdevollen Altern für alle Menschen.

In ihrer Stellungnahme erklärt die FAIE, dass die erfolgte Repression bestätigt, dass das „Protokoll zur Aufrechterhaltung der öffentlichen Ordnung bei Straßensperrungen” systematisch dazu verwendet wird, sozialen Protest einzuschüchtern und zu kriminalisieren – insbesondere den von Menschen, die die Auswirkungen eines wirtschaftlichen Kürzungsmodells besonders stark zu spüren bekommen. Die FAIE fordert von der Nationalregierung „die sofortige Beendigung der repressiven Politik und die Aufhebung des Protokolls zur öffentlichen Ordnung“.