Un incendio forestal es un fuego descontrolado de rápida propagación que afecta a bosques, llanuras, pastizales y pasturas. El 95% se producen por acción humana. Para evitarlos es importante que tengas en cuenta estas recomendaciones
Foto: Misiones Online
🔥 Recomendaciones
Evita fumar y arrojar fósforos, colillas o botellas rotas en el suelo ya que pueden ser un medio para generar fuego por la intensidad del sol.
Si realizás una fogata, colocá piedras alrededor del fuego y asegurate de apagarlo correctamente con agua o tierra.
Evitá encender fuego en época de sequía.
Si ves un incendio forestal, avisá de inmediato a los bomberos. Recordá que una columna de humo significa la posibilidad de un incendio forestal.
🔥 Si vivis en una zona con riesgo de incendios forestales, como Misiones:
No apiles troncos ni ramas cerca de la casa. Mantené el pasto corto y construí una línea de defensa de al menos 3 metros de ancho sin vegetación alrededor de la vivienda.
Mantené los techos, canaletas y desagües libres de hojas, ramas y pinocha, ya que en un incendio es material combustible que alimenta al fuego.
Si tenes pileta, mantenela con agua durante todo el año, ya que puede ser utilizada por los bomberos para controlar el avance del fuego.
Si contás con tubos de gas o un depósito de gas butano (Zeppelin), es muy importante que te asesores sobre las normas de seguridad apropiadas.
Si tenes depósitos con combustibles líquidos (nafta, gasoil), asegurate de que se encuentren en lugares libres de basura o leña y lejos de la exposición solar. Colocá cartelería informativa y a la vista.
Es recomendable usar rejillas matachispas en los escapes de los vehículos para circular por el monte.
Ante una emergencia comunícate al 911
🔥 Si estás ante una situación de riesgo por un incendio forestal, te recomendamos:
Tratá que el suelo alrededor de la vivienda esté húmedo para evitar el avance del fuego.
Mantené las puertas y ventanas totalmente cerradas para evitar el ingreso del humo y de las chispas.
No salgas de tu casa a menos que el personal de bomberos o de las Fuerzas de Seguridad (Defensa Civil, Policía) te lo indique o que el riesgo de incendio de la vivienda sea inminente.
Si la autoridad determina la evacuación, acatá las indicaciones. Procurá cubrirte boca y nariz con un paño, para no inhalar humo.
Procurá caminar cerca de aguas abiertas poco profundas (ríos, lagos o lagunas), que podrían servirte como vías de evacuación.
No vuelvas a un área quemada. Los sitios calientes pueden reactivarse sin previo aviso.
En caso de quedar rodeado por el fuego, trata de llegar a la zona ya quemada, alejándote del fuego por las zonas laterales del mismo y en sentido contrario a la dirección del viento.
Nunca te sitúes en la parte alta de una montaña ni corras en sentido ascendente, el fuego avanza y sube 17 veces más rápido que tú.
Si la situación se torna peligrosa, acuéstate en el suelo y trata de respirar a través de una prenda mojada. Nunca intentes huir de la zona atravesando caminos afectados por el fuego o por columnas de humo.
Con el apoyo de la Fundación Hora de Obrar, el Jardín de Infantes del Colegio Holandés de Tres Arroyos impulsa un espacio de educación ambiental que busca acercar a la comunidad al valor de las plantas nativas, la biodiversidad y el cuidado de la creación.
El sendero, ubicado en el Parque Miedan de Tres Arroyos, Provincia de Buenos Aires, ofrece a quienes lo visitan un recorrido interpretativo donde es posible conocer distintas especies de flora autóctona. Cada planta está identificada con carteles informativos escritos a mano por los niños y niñas del jardín, y códigos QR. Al escanearlos, se accede a datos que los más pequeños recolectaron sobre cada especie, compartiendo así el fruto de su aprendizaje con toda la comunidad.
Los plantines que forman parte del sendero se cultivaron en la huerta ecológica del jardín, en la que las infancias aprenden a sembrar y cuidar las plantas nativas. Esta labor no termina aquí: el próximo año, el proyecto continuará sumando información y nuevas especies, sembrando semillas en el vivero y trasplantando en el parque para seguir alimentando el sendero.
Educación ambiental con raíces locales
El Sendero Ecológico “Pasos Verdes” es mucho más que un recorrido natural; es una herramienta educativa que permite a niños, niñas y sus familias conectar con el entorno y comprender el valor de los ambientes pampeanos. En un contexto donde estos ecosistemas enfrentan modificaciones constantes, contar con estos relictos de pastizal representa una oportunidad única para aprender sobre la biodiversidad y reflexionar sobre cómo nuestras acciones cotidianas afectan a nuestro entorno.
Al recorrer “Pasos Verdes”, no solo descubrimos el valor de las plantas nativas y su importancia para el equilibrio ecológico, sino que también reforzamos el compromiso de cuidar nuestro entorno. La posibilidad de vincularnos con la naturaleza, disfrutarla y aprender de ella es, sin duda, una experiencia transformadora.
Antigua Guatemala fue el escenario de la reunión de la Comunidad de Práctica de Apoyo Psicosocial Basado en la Comunidad. Este evento, organizado por la Alianza ACT, reunió a representantes de distintos países para fortalecer estrategias de cuidado comunitario frente a las adversidades de nuestra región.
Del 20 al 22 de noviembre, se evaluó la efectividad de las estrategias actuales de apoyo psicosocial y se compartieron experiencias de aprendizaje, con enfoques específicos en las acciones realizadas en El Salvador y Chile. La colaboración permitió trazar un horizonte claro al definir un plan de acción para 2025-2026, con metas, actividades e hitos para fortalecer el trabajo de los 12 foros de ACT en la región.
La reunión contó con la valiosa participación del Lic. Selvin Chan, del Programa de Salud Mental del Ministerio de Salud Pública de Guatemala, y con un taller de cuidado a cargo de la Lic. Lissette Ordoñez. Estos espacios permitieron profundizar en enfoques de cuidado que, en contextos de desigualdad y desamparo, se convierten en una respuesta contracultural y esencial para el bienestar colectivo.
“El cuidado psicosocial basado en la comunidad no es solo una estrategia de contención: es una herramienta de transformación social. Cuando los procesos de apoyo están enraizados en las comunidades, se fortalecen las redes locales, potenciando proyectos colectivos que defienden la dignidad y el derecho a la salud mental”, comentó Martín Elsesser, responsable del proyecto de Diaconía Comunitaria de Hora de Obrar y psicólogo social.
Desde Hora de Obrar, celebramos estas iniciativas y reafirmamos nuestro compromiso con el cuidado integral de las personas y comunidades, como parte esencial de nuestra misión de justicia y solidaridad.
Cuando los imperios quieren más, y no paran hasta conseguirlo, la gente no para de sufrir. Esto era justamente lo más difícil. La lucha por la tierra entre los países vecinos ponía en peligro todo el tiempo a la gente, sobre todo, en el campo. Reflexiones sobre la historia de Ruth y Noemí.
FOTO: UNRWA España – www.unrwa.es
Por el Pastor Jorge Weishein
Las especies del mundo en sus orígenes eran mayormente nómadas, las personas también. Básicamente esto era así porque el mundo no era de nadie, o en el mejor de los casos, sólo de Dios. En realidad, la gran noticia de nuestros días es la reducción de la biodiversidad de los ecosistemas, la gran cantidad de especies en vías de extinción. Las personas estamos de paso, en viaje. Este viaje tiene códigos, para que lo podamos disfrutar.
Cuando los imperios quieren más, y no paran hasta conseguirlo, la gente no para de sufrir. Esto era justamente lo más difícil. La lucha por la tierra entre los países vecinos ponía en peligro todo el tiempo a la gente, sobre todo, en el campo. En la tierra siempre viven especies. La tierra nunca es inerte y jamás está deshabitada. La tierra es un ser vivo en constante transformación. Algunas personas cuando la habitan creen tener más derecho que todas las demás especies, incluso otros seres humanos. La lucha por la propiedad y el control de la tierra es siempre una lucha inmoral.
En el Antiguo Testamento, la historia de Ruth es la historia de un viaje, con sus sueños y contradicciones, sus idas y vueltas. Una de esas tantas historias desde que el mundo es mundo. La gente que vive en una tierra, trata de vivir bien, en paz, pero la situación del país y del contexto no ayuda. Los esfuerzos de la familia son insuficientes de cara a tantos frentes. Era necesario hacer algo al respecto y tomaron una decisión.
Esta historia empieza con una migración. Si tenemos en cuenta que en nuestros días migran unos 300 millones de personas por año en todo el mundo, esta es una realidad conocida. Pero esta historia empieza antes de conocer a Ruth. La historia empieza con Noemí y su familia. Ellos vivían en el campo, en la zona de Belén. Están cansados de los ataques y la guerra eterna entre su tribu y las tribus vecinas. La guerra es una peste crónica alimentada de egos perversos y sufrimientos espantosos. Pero, la gente del campo, es la más vulnerable porque está más aislada y es la que tiene más que perder porque vive de producir alimentos. Esto es un gran botín para cientos de hombres hambrientos. Los ejércitos devoran todo a su paso. No por nada la biblia compara los ejércitos muchas veces con una plaga de langostas. Las mujeres siempre fueron parte del botín. La guerra suele ser una cosa de hombres pero no de cualquier tipo de hombres. La guerra sigue usando costumbres de hombres abusadores y violentos. La necesidad de humillar y de hacer sufrir, y en este caso, la costumbre de violar, sigue siendo una estrategia de guerra.
Noemí conoció esta realidad en su tiempo, en su propio cuerpo, en su propia familia. Ella habló con Elimélec. Era preferible vivir en el extranjero como trabajadores informales que seguir sufriendo en su propio país como si fueran extraños. Ella, una mujer muy dulce y él una persona muy creyente. Ellos eran padres de dos hijos, Mahlón, que vivía enfermo, y Quilión, que nació muy débil. La situación familiar era precaria, los medios que tenían eran insuficientes y los problemas económicos y políticos en el país sólo trajeron dudas y cada vez más miedo. La incertidumbre los llevó a decidir migrar a un país vecino. Un país rico, un poco más estable y con más medios para poder vivir. En nuestros días, la mitad de las personas migrantes son mujeres, sin embargo, ellas tienen la mitad menos de posibilidades de encontrar trabajo que los varones.
Esta decisión es dura. Implica dejar su casa a algún pariente, su tierra, sus ingresos, sus familias, sus amistades, para ir a otro país a empezar de nuevo. En el origen, sus países eran pueblos hermanos, pero la historia los dividió en regiones distintas. El reino de Moab fue un enemigo histórico del reino de Judá. Las escrituras advierten permanentemente sobre el peligro de Moab y describen medidas extremas contra la tierra, los árboles, los ríos, las mujeres y los príncipes. Sin embargo, la familia de Elimélec se siente más segura viviendo y trabajando entre aquellos enemigos que sometida a la violencia y el hambre permanente en su propio pueblo.
La gente en Moab vive más tranquila y es un país próspero. El idioma es similar entre sus pueblos. Elimélec y su familia siguieron la tradición migrante del pueblo hebreo, un pueblo trabajador y nómada, trabajadores golondrina, que se ofrecían como changarines para distintos trabajos. La familia decidió ir al otro lado del Mar Muerto, cruzar Sodoma y Gomorra, y probar suerte.
Los imperios que conquistaron esta región palestina usaron siempre las internas entre los pueblos para alimentar las guerras entre ellos, pero a la hora de la conquista militar y su sometimiento económico, no tuvieron la más mínima compasión con ninguno de ellos. Esta historia trasciende las fronteras de estos pueblos y tiene algo para decir sobre la situación en estas tierras.
Las cosas no salieron como esperaban. Las condiciones de trabajo en Moab y la salud precaria se llevaron la vida de Elimélec en poco tiempo. Noemí tuvo que afrontar sola la vida con sus hijos en tierras extrañas. La vida como viuda con dos hijos pequeños en este país lejano fue muy diferente a sus sueños. Cuando sus hijos crecieron, Noemí logró que pudieran casarse con dos chicas jóvenes de Moab. Sin embargo, la salud de los hijos tampoco era la mejor, y la situación en la que vivían y trabajaban se llevó sus vidas, como la de su padre, pocos años después.
Así es como Noemí queda sola con sus dos nueras palestinas y necesita volver a recalcular para decidir cómo salir adelante. El valle del reino de Moab tiene ciudades opulentas; la tierra es rica en granos, frutos y ganado ovino, y también cuenta con una región montañosa desértica productora de salitre y minerales. Moab es una tierra de oportunidades. Sin embargo, la violencia y las desgracias que Noemí vivió en el extranjero la fueron endureciendo y amargando.
Ella decidió volver a sus tierras y dejar su destino en manos de Dios. Noemí liberó a sus nueras para que rehicieran sus vidas y juntó sus cosas para regresar a su país. Una de sus nueras, Orfá, escuchó a Noemí y decidió volver con su familia. Ruth, en cambio, admirada por la ternura, la fe, la cultura y la entereza de su suegra Noemí, decidió acompañarla y rehacer su vida con ella. Las jóvenes huérfanas no tenían a dónde regresar, y las jóvenes viudas no siempre tenían oportunidad de volver a casarse, menos aún si habían estado casadas con un extranjero.
Ellas llegaron a Belén y, cuando la gente vio a Noemí, no lo pudo creer: «¡Es Noemí!» Pero ella no sintió que tuviera algo lindo para contar. Resumió su vida como una serie de fracasos y pérdidas. Noemí, como tantas veces el propio pueblo de Israel, volvió del exilio a la tierra de la promesa y de la esperanza. Esta historia está grabada en la memoria de fe del pueblo de Israel. Es una historia ejemplar sobre la importancia de la solidaridad con las personas migrantes para poder rehacer una vida y vivir en paz.
Esta historia nos muestra que, en definitiva, todas las personas somos migrantes porque la vida en la creación es dinámica. Las personas somos parte de un ecosistema, una red de vida amplia que involucra a todo el contexto. Ni la identidad ni la integridad de una persona se definen por la propiedad de la tierra que habita. Ruth enseña sobre la convivencia en la diversidad cultural y religiosa. Es un llamado a escuchar la unidad de la tierra entre los pueblos.
El retorno del exilio vuelve la historia sobre sí misma. La historia cambia con la tierra. Los valles frutales de Moab, con sus tierras fértiles, sus ríos y sus fiestas, lejos de resultar dulces y felices, fueron amargos y tristes para Noemí y su familia. Ahora, Noemí llegó con Ruth a la aldea de Belén en tiempos de cosecha de cebada, en primavera, a finales de la época de lluvias, entre finales de marzo y comienzos de abril. La cebada se cosecha entre la fiesta de la Pascua judía y la fiesta de las Semanas. En la Pascua se celebra la liberación del pueblo de la opresión por parte de Dios, y en la fiesta de las Semanas se celebra la entrega de la ley a su pueblo para el cuidado de toda la creación. Ninguna de estas festividades es aleatoria para esta historia.
En la cultura bíblica, los tiempos de la tierra y la historia del pueblo con la tierra están integrados profundamente a la fe. De la misma manera, los nombres orientan los actos y el sentido de la vida de las personas y los lugares. Orfá regresó a su casa. Ruth, la compañera, se puso a disposición de la dulce Noemí. Elimélec («mi Dios es mi rey»), fallecido, muestra la anomia y el abandono en el que se encuentra el pueblo.
Ellas lograron salir de la situación de opresión en Moab y comienzan de nuevo en las tierras de la familia. Habían dejado sus tierras en manos de un pariente porque, en este tiempo, las tierras no se vendían; se heredaban por derecho familiar. Noemí volvió con su nuera y reclamó su derecho a vivir en su tierra. Pero esto implicaba respetar algunos pasos legales. Ellas debían ser integradas a la familia de su pariente, ya que no podían ser propietarias. Moab, en el imaginario judío, siempre fue sinónimo de vida licenciosa y objeto de los prejuicios más horrendos. Noemí volvió viuda a Belén y, además, regresó con una nuera viuda extranjera, nativa de Moab.
Noemí y Ruth tienen que lidiar con todos estos prejuicios. Noemí, seguramente, algo habrá hecho para que Dios le quite a su esposo y sus dos hijos. Ruth, además de mujer, es viuda, moabita, pobre, vive sola con una viuda judía, habla otro idioma, tiene otro tono de piel y es de otra religión. Sin embargo, ella deja a todo el mundo con la boca abierta.
Ruth sale al campo en plena cosecha a juntar un par de brazadas de cebada. La cebada se usaba para alimentar a los animales, pero ella espera poder preparar una comida para ella y su suegra. Ruth actúa conforme a la ley, pero además hace mucho más que eso. La ley tenía previsto que las personas necesitadas juntaran los restos que quedaban en el campo durante las cosechas, y los campesinos tenían la obligación de dejar una parte de su campo para la cosecha de viudas, huérfanos y extranjeros. Ruth trabajó todo el día bajo el rayo del sol para poder reunir la cantidad necesaria para alimentarse ella y su suegra. Su constancia y su compromiso llamaron la atención de todas las personas que estaban en el campo.
Ruth, una extranjera respetuosa de la ley y sumamente responsable, estuvo trabajando a la vista de la cuadrilla contratada por el capataz del campo ese día. Ruth se destacó por su esfuerzo y dedicación, y le llamó la atención a Boaz, el patrón y dueño del campo. Cuando Boaz reconoció a Ruth como la nuera de Noemí y de Elimélec, le brindó su protección, haciendo honor a su nombre. Boaz trató a Ruth como una más de la cuadrilla y le ofreció los mismos derechos de trabajo que las demás personas del campo. Ruth cosechó a la par de quienes estaban trabajando. A la hora de comer, Boaz la invitó a compartir con todos ellos y, al final del día, además le ofreció llevarse algo más de semillas para compartir con Noemí. Ruth extraña los sabores y los aromas de su tierra, pero trata de acostumbrarse a los alimentos de su nueva familia.
Ruth vio que Boaz era una buena persona y alguien en quien confiar. Ella se acercó a Boaz una noche para reclamarle su derecho a ser rescatada como compañera, por ser nuera de Elimélec. Boaz pudo haber aprovechado su posición de privilegio para abusar de la situación de vulnerabilidad de Ruth, ya que fue ella quien tomó la iniciativa: se acercó a su habitación mientras él dormía y se acostó a su lado. Ella le propone una relación de pareja.
Ruth tomó esta decisión junto con Noemí porque tenía una gran confianza en él. De este modo, expresó su deseo de estar con Boaz. Él confirmó su respeto y cariño por Ruth protegiéndola para que nadie pudiera lastimarla y defendiendo públicamente su derecho a ser rescatada.
Boaz se asombra del coraje, altruismo y piedad de Ruth, y la cuida de cualquier tipo de exposición social y maltrato público. El derecho al rescate les permitía poder vivir con Noemí junto con la familia de Boaz en el mismo campo. Boaz estaba encantado con Ruth y, además, agradecido con Noemí y Elimélec por la confianza que habían puesto en él todos esos años para trabajar sus tierras. Sin embargo, existía otro familiar directo que debía rechazar su derecho a rescatar a Ruth y a Noemí, y con ello renunciar a los derechos sobre la fracción de tierra familiar que Boaz había usado durante tantos años en concesión.
Ruth y Boaz tuvieron un hijo tiempo después y lo llamaron Obed, que significa “persona fiel”. Obed fue el abuelo de David, quien sería, muchos años después, rey de Israel. David, cuya familia se dedicó durante años a la vida pastoril, tuvo tierras y pasó a la historia de Israel gracias a su descendencia de una joven palestina rescatada por un judío de bien, capaz de romper con todos los estereotipos de su tiempo y respetar la ley con amor y fidelidad a Dios. Dada la tradición matrilineal de la identidad judía, el rey David era de origen palestino.
La historia de Ruth pasó a la Biblia como un ejemplo de integridad en medio de situaciones complejas e injustas. Cuando los hombres volvían con sus familias del extranjero, las leyes contemplaban su inclusión en la familia. Pero ¿qué pasa cuando quienes vuelven son mujeres solas, con sus familias diezmadas por la pobreza, las enfermedades y la opresión?
La falta de autoridades responsables con su pueblo, los conflictos armados y guerras interminables, las hambrunas y epidemias que desaparecen familias enteras, las conquistas que destruyen la creación con incendios y devastaciones, los abusos a los ecosistemas y las injusticias de gobiernos autoritarios debilitan las relaciones entre las personas y desconciertan a la gente.
La historia de Ruth enseñaa respetar los tiempos de la tierra y la distribución de sus bienes para que todas las personas puedan vivir, la diferencia que hace el cuidado mutuo entre varones y mujeres, y la importancia del respeto entre personas independientemente de su cultura y religión.
En la actualidad, 120 millones de personas han tenido que migrar a causa de la guerra para proteger sus vidas y buscar refugio. El 40% de esta población son niños y niñas. Asimismo, el 80% de las personas desplazadas por desastres relacionados con el clima son mujeres, pero quienes discuten estos temas son mayormente varones. Las mujeres y las infancias son las más afectadas por el cambio climático, lo que profundiza las desigualdades debido a la falta de infraestructura y condiciones en los pueblos más pobres.
El respeto de la ley protege el equilibrio de toda la creación. Por eso, la justicia climática es un problema ético y político global que comprende tanto la movilidad de las personas como la dinámica de los ecosistemas afectados por la acción humana.
La Fundación Red Ecuménica de Educación Teológica (REET) lanza una propuesta formativa a distancia diseñada para fortalecer la misión de las iglesias en sus acciones de servicio y justicia social. La inscripción está abierta para cursar en 2025.
La Diplomatura en Diaconía: Fundamentos Bíblico-Teológicos está dirigida a miembros de iglesias, comunidades e instituciones que deseen reflexionar y mejorar sus prácticas diacónicas. Durante la cursada los y las estudiantes adquirirán herramientas para facilitar procesos de reflexión, promover proyectos diacónicos y participar en equipos comunitarios con una mirada crítica e inclusiva.
Entre los objetivos específicos de esta formación se destacan:
Conocer los fundamentos bíblicos de la práctica diaconal mediante herramientas exegéticas.
Comprender los principios teológicos de la diaconía desde la perspectiva de la Reforma en América Latina.
Analizar experiencias diacónicas actuales en el ámbito ecuménico.
Reflexionar críticamente sobre la realidad social en la que se insertan las comunidades.
Elaborar o fortalecer proyectos diacónicos en contextos específicos.
Promoción de lanzamiento
Quienes se inscriban y abonen la matrícula entre el 5 y el 20 de diciembre de 2024 podrán disfrutar de un 80% de descuento, pagando solo USD 6 por la inscripción.
Para más información sobre aranceles o formas de pago:
Esta iniciativa se inscribe dentro del Programa de Formación en Diaconía para la Misión de la REET, impulsada por la Iglesia Evangélica del Río de la Plata, la Iglesia Evangélica de los Discípulos de Cristo y la Iglesia Evangélica Valdense del Río de la Plata.
El director ejecutivo de la Fundación Protestante Hora de Obrar envía un mensaje a todas las organizaciones y comunidades que comparten el camino por un mundo más justo y solidario.
El cambio climático, las injusticias de género y las profundas desigualdades sociales son desafíos que nos ocupan día a día. Sin embargo, Nicolás Rosenthal, director ejecutivo de la Fundación Hora de Obrar subraya la importancia de no caer en la desesperanza. “Sigo convencido de que el amor, la solidaridad y el trabajo conjunto pueden transformar nuestra realidad”.
El mensaje resalta el espíritu de la Navidad como un llamado a vivir los valores fundamentales del Evangelio: amor, justicia y solidaridad. “Con estos valores, Jesús nos invita a transformar el mundo que nos rodea”, recuerda enfatizando el papel activo que todos y todas podemos asumir para transformar la realidad.
Con este mensaje, Hora de Obrar extiende su gratitud a quienes la acompañan en este camino, destacando la diversidad de esfuerzos que convergen en un mismo propósito: compartir y repartir la cosecha entre todas y todos.
¡Fundación Hora de Obrar les desea una Bendecida Navidad!
30 organizaciones piden firmas para reconocer al sector como estratégico para el desarrollo rural. También proponen promover mercados locales y tecnologías sostenibles y la urgente aplicación efectiva de la Ley de Reparación Histórica 27.118.
Hora de Obrar acompaña la solicitud elaborada por agricultores y agricultoras de 30 organizaciones de la agricultura familiar del centro y norte de Argentina para fortalecer la demanda por políticas justas y necesarias para asegurar un futuro mejor para toda la sociedad. A continuación reproducimos el petitorio e invitamos a sumar firmas aquí.
Frente a la pobreza e indigencia en nuestro país, la agricultura familiar produce y abastece localmente el 74% de los vacunos, el 75% de los caprinos, el 60% de la yerba mate, el 50% de los porcinos, el 41% de las hortalizas y el 30% de los productos apícolas, entre otros. Además, genera el 50% del empleo genuino a nivel rural (INTA, 2015). Aun así, según un estudio realizado por la Universidad de Buenos Aires (en 2021), el 85% de los consumidores argentinos no sabe qué es la Agricultura Familiar y el 70% de los consumidores no sabe dónde encontrar productos saludables y accesibles. Los agricultores familiares no solo nos proporcionan alimentos de alta calidad, sino que también son esenciales para la sostenibilidad ambiental y la preservación de nuestros paisajes rurales. Sin programas de apoyo, enfrentan competencia desleal, intermediación injusta, falta de acceso a la tierra y una total falta de reconocimiento por parte del Estado.
¿Qué pedimos?
Demandamos a los distintos niveles de los gobiernos la implementación de medidas concretas para fortalecer a nuestros agricultores familiares: Es hora de actuar. El Estado debe tomar medidas urgentes para fortalecer la autonomía y sostenibilidad de nuestros agricultores familiares.
Unidos, podemos proteger la agricultura familiar y garantizar un futuro con alimentos frescos, saludables, a precios accesibles y producidos de manera sostenible en Argentina.
Con facilitación de Hora de Obrar, un grupo de varones de la Congregación Evangélica de Humboldt en Santa Fe participó de un taller para pensar nuevas masculinidades, estereotipos de género, los mandatos culturales y cambios en las dinámicas familiares y sociales.
El pasado 28 de noviembre el grupo de varones de Humboldt invitó al pastor Jorge Weishein de la Fundación Hora de Obrar a dar un taller para explorar, desde sus propias experiencias, los cambios necesarios para construir relaciones más justas, equitativas y respetuosas.
El encuentro comenzó con una reflexión bíblica liderada por el diácono Rubén Mohr, quien recordó el relato de Génesis 1:27 sobre la creación del hombre y la mujer como iguales. A medida que avanzaban las conversaciones Weishein contó que fue posible entender que los estudios de género y la perspectiva de género buscan la igualdad y el cuidado en todos los aspectos de la vida, para todas las personas.
Participaron adultos de distintas generaciones y oficios que coincidieron en que la realidad fue cambiando con los años y que es necesario conversar entre los varones sobre los cambios necesarios. “Todos los que asistieron fueron predispuestos a escuchar, a aprender, a compartir sus visiones, sus vivencias sobre el tema”, comentó uno de ellos. Este espíritu permitió abordar temas como los estereotipos de género, los mandatos culturales y las transformaciones en las dinámicas familiares y sociales.
“La charla para mí fue una especie de refresca memoria, porque a veces hay códigos que no se usan o se usan demasiado fuerte”, señaló otro participante, mientras que otro destacó que la experiencia le recordó cómo lo educaron sus padres y le permitió reflexionar sobre los cambios que implementó en la crianza de sus hijos. Otros participantes valoraron la importancia de aprender a escuchar a sus hijos y respetar sus decisiones, así como reorganizar las responsabilidades familiares para construir relaciones más equitativas.
“La charla deja instaladas consignas para pensar cuestiones de la masculinidad que están insertas en la sociedad, mandatos sociales que podemos seguir trabajando en el grupo de varones”, concluyó un participante.
Estas instancias reafirman el compromiso de la comunidad de caminar hacia formas de convivencia más justas y humanas, inspiradas por la fe y el llamado a construir un mundo donde la igualdad y el respeto sean la norma.
“Sean humildes y amables; tengan paciencia y sopórtense unos a otros con amor” (Efesios 4,2)
La reciente Cumbre del Clima en Bakú, Azerbaiyán, volvió a evidenciar la falta de ambición y acción concreta frente a la emergencia climática y el poderoso lobby económico. Esta conferencia, que prometía ser la “COP del financiamiento climático”, concluyó sin garantizar fondos suficientes, ni compromisos claros, ignorando las demandas de las juventudes, mujeres y grupos más afectados.
16 de noviembre de 2024, Bakú, Azerbaiyán. En la COP29, ACT Alianza participó con la sociedad civil y realizó una acción silenciosa afuera de la sala plenaria principal, destacando la necesidad de justicia climática y señalando el silenciamiento de demasiadas voces en los pasillos de la COP. El evento fue parte del Día Mundial de Acción por la justicia climática.
Financiamiento insuficiente
El resultado más discutido fue el “Nuevo Objetivo Colectivo Cuantificado sobre Financiación del Clima” (NCQG), que establece la inversión necesaria para apoyar a las naciones más vulnerables en la implementación de acciones que mitiguen el cambio climático. De los 1,3 billones de dólares que los países del sur global estimaron necesarios, se acordó una movilización anual de tan solo 250.000 millones de dólares para enfrentar la crisis climática. Además, gran parte de estos fondos provendrían de mecanismos financieros privados, lo que podría aumentar el endeudamiento de las naciones ya afectadas.
A esta limitación se suma la falta de claridad sobre cómo se movilizarán estos recursos y qué mecanismos garantizarán su cumplimiento. La historia de incumplimientos previos en materia de financiamiento por parte de los países desarrollados deja un sabor amargo y refuerza el escepticismo de las comunidades más afectadas.
ACT Alliance. Simon Chambers.Photo: FLMPhoto: FLM
En deuda con los derechos humanos, la juventud y la justicia de género
La ausencia de temas fundamentales en el acuerdo final de la COP29 deja en evidencia las limitaciones estructurales que aún persisten en las negociaciones climáticas globales. Uno de los puntos más críticos fue el tratamiento superficial de las pérdidas y daños sufridos por los países más vulnerables.
En cumbres anteriores se crearon mecanismos de financiamiento pero la falta de compromisos concretos para fortalecer estos fondos impide una respuesta efectiva y oportuna a las catástrofes climáticas que ya están afectando a las comunidades del sur global.
Además, la perspectiva de género y los derechos humanos fueron prácticamente ignorados en el documento final. Una transición justa requiere garantizar que las mujeres y las comunidades marginadas tengan voz y participación activa en las decisiones climáticas. Las mujeres, especialmente en los países en desarrollo, son quienes suelen estar en la primera línea de los impactos ambientales y, sin embargo, continúan siendo excluidas de los procesos de toma de decisiones. La falta de enfoque de género en estos aspectos impide construir políticas inclusivas y sostenibles que contemplen la realidad de quienes más sufren las consecuencias del cambio climático.
ACT Alliance. Simon Chambers.ACT Alliance. Simon Chambers.ACT Alliance. Simon Chambers.
Asimismo, se pasó por alto la participación activa de las juventudes, una omisión significativa considerando que serán quienes heredarán las consecuencias de la inacción actual. A pesar de los crecientes movimientos juveniles que demandan acciones urgentes y ambiciosas, las voces de esta generación no tuvieron el espacio necesario para influir en las decisiones.
Estas exclusiones no son meras omisiones; evidencian una visión fragmentada y limitada de la justicia climática. Ignorar a los grupos más vulnerables, las mujeres y juventudes significa no enfrentar de manera integral la crisis climática global. Sin un cambio en la estructura y las prioridades de estas cumbres, los acuerdos seguirán siendo insuficientes para lograr una transición justa y equitativa hacia un futuro sostenible.
Transición energética: un paso atrás
Otro punto crítico fue el retroceso en los compromisos de eliminación de combustibles fósiles. A diferencia de la COP28, donde se incluyó un llamado histórico para abandonar gradualmente estos recursos, el texto final de Bakú apenas reafirmó la necesidad de “acelerar la transición hacia energías limpias” sin medidas específicas ni plazos concretos. Este lenguaje ambiguo resulta alarmante, considerando que los combustibles fósiles son la principal causa del cambio climático.
Por otro lado, la falta de un marco regulatorio robusto para los mercados de carbono y los mecanismos de compensación también generó preocupación. Aunque se lograron acuerdos sobre los artículos 6.2 y 6.4 del Acuerdo de París, las salvaguardas ambientales y de derechos humanos quedaron sujetas a interpretaciones laxas. La ausencia de controles estrictos y mecanismos de transparencia efectiva pone en riesgo la integridad ambiental de estos mercados, y podría perpetuar inequidades en lugar de remediarlas.
Photo: FLMPhoto: FLMPhoto: FLM
La omisión de estos temas críticos refleja una tendencia preocupante: las negociaciones climáticas continúan siendo moldeadas por los intereses económicos y geopolíticos de los países más poderosos. La falta de compromisos vinculantes y la dilución de los acuerdos impiden alcanzar el nivel de transformación que la crisis climática demanda con urgencia. En este contexto, la comunidad internacional se enfrenta a un desafío persistente: romper el ciclo de inacción y retórica para dar paso a acciones concretas y justas que protejan a quienes más lo necesitan y garanticen un futuro sostenible para todos.
Mirando hacia la COP30: una oportunidad en América Latina
La próxima COP30 se celebrará en Belém, Brasil, un escenario clave para que América Latina lidere una agenda climática más ambiciosa e inclusiva. Será también una oportunidad para que los países presenten nuevos Planes Nacionales de Adaptación y revisen sus Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC), compromisos cruciales para limitar el calentamiento global a 1,5 °C.
Sin embargo, el desafío será superar los intereses geopolíticos y económicos que han dominado las últimas conferencias. Para ello, será necesario:
Aumentar el financiamiento climático a niveles adecuados (al menos 1,3 billones de dólares anuales).
Establecer mecanismos claros de rendición de cuentas para garantizar que los compromisos se cumplan.
Incluir en las negociaciones a quienes más sufren los impactos: comunidades vulnerables, jóvenes y mujeres.
La falta de resultados en Bakú subraya la urgencia de que los líderes mundiales escuchen y respondan a las demandas de las comunidades que enfrentan la crisis climática en primera línea. La COP30 en Brasil no puede ser otro eslabón en la cadena de promesas incumplidas. Es hora de que las palabras se traduzcan en acciones concretas y transformadoras para garantizar un futuro sostenible y justo para todas las personas.
La colecta navideña invita a hacer realidad la construcción de la Escuela Primaria N° 270 “El Redentor” de la Congregación Evangélica de Crespo en Entre Ríos. Conocé el proyecto y descargá los materiales para la catequesis y el culto.
Hace más de tres décadas que el Jardín de Infantes “Rayito de Sol” es un espacio de formación para niños y niñas. Hoy, la falta de vacantes en las escuelas primarias locales motiva a la Congregación Evangélica de Crespo a soñar con una escuela donde cada niño y niña tenga la oportunidad de recibir una educación de calidad.
La visión de la congregación no se limita al aprendizaje académico; busca compartir valores esenciales con las familias de toda la comunidad. Esto se refleja en el logo de la escuela, donde un libro con una cruz central simboliza los 12 valores fundamentales que guiarán la formación de los estudiantes.
Materiales para celebrar juntos la catequesis y el culto navideño
En el marco de esta campaña la Fundación Hora de Obrar acerca actividades para las escuelitas bíblicas y una presentación especial para proyectar en los cultos de Nochebuena o Navidad. Podés descargarlas haciendo click acá.
Con tu apoyo, este sueño puede convertirse en realidad. Hagamos de esta Navidad un tiempo para construir en comunidad un futuro con más educación.